Erróneamente pensamos que cuando limpiamos también desinfectamos. Pero en cambio ambos procesos conllevan resultados muy distintos.
También consideramos que un sitio u objeto está limpio, cuando no encontramos suciedad visible. Pero esta higiene es superficial ya que a simple vista no podemos detectar los gérmenes y bacterias que existen a nuestro alrededor.
Una buena limpieza y desinfección es imprescindible para evitar contagios e infecciones en cualquier sector, y es determinante en áreas como la industria alimentaria, los centros sanitarios, las escuelas y guarderías, los laboratorios, las cocinas o los baños.
El mercado ofrece una amplia gama de desinfectantes para eliminar microorganismos como: virus, hongos, algas o bacteria. Hay productos específicos para la industria alimentaria – con Registro HA -, para el sector sanitario, para aseos, vestuarios, guarderías, etc. Productos desinfectantes con distintos compuestos como: amonios cuaternarios, aldehídos, peróxidos, hipocloritos, yodoformos…, que les proporciona funciones virucida, fungicida, bactericida, etc. Ante tanta variedad es importante dejarse aconsejar por profesionales de la higiene para elegir con seguridad el mejor producto para cada área o función
A continuación damos unas sencillas recomendaciones para conseguir una correcta desinfección en su negocio.
¿Qué diferencia existe entre limpiar y desinfectar?
Limpiar implica sacar gérmenes y suciedad de superficies u objetos. Este proceso no elimina por completo los gérmenes, disminuye la cantidad y riesgo de propagar la enfermedad.
Desinfectar implica eliminar a los microorganismos nocivos y evitar su desarrollo. Este proceso no limpia necesariamente superficies sucias, pero al destruir gérmenes se disminuye considerablemente el riesgo de propagar enfermedad o infecciones.
Por qué es tan importante limpiar y desinfectar
- Para evitar la propagación de infecciones, enfermedades o contagios.
- Asegurar que el servicio o producto que le ofrecemos al cliente sea de calidad.
- Generar confianza en el cliente.
- Prevenir la contaminación en los productos alimenticios.
- Para cumplir con el Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control (APPCC o HACCP en inglés) que garantiza la inocuidad alimentaria.
- Alargar la vida útil de las instalaciones, locales, útiles y equipo.
- Mejorar la imagen de la empresa.
- Alcanzar un entorno laboral saludable.
Tipos para una correcta desinfección
Cada sector, actividad o negocio está sujeto a determinadas normativas. Es importante que antes de utilizar un desinfectante nos aseguremos que éste cumple con la normativa vigente para su aplicación. Por ejemplo, los desinfectantes utilizados en industria alimentaria necesitan de un registro específico (Registro HA) que autoriza su uso para este tipo de instalaciones.
A la hora de aplicar un desinfectante es imprescindible controlar las siguientes variables para obtener un resultado óptimo:
- Tiempo de contacto: el desinfectante y las superficies o útiles deben estar en contacto durante un tiempo determinado para asegurar la eliminación de microorganismos.
- Temperatura de la solución: Debe ser uniforme, se recomienda un rango de temperatura que va de 20 ° C a 49 ° C.
- Concentración de la solución: Varía de acuerdo al tipo de desinfectante, por lo que debe seguirse la recomendación del fabricante o el profesional asesor.
También es importante valorar el coste económico del producto y su efectividad o posibles peligros de aplicación. Existen productos de bajo coste y alta efectividad, pero que sin embargo, pueden ser productos tóxicos, cancerígeno o mutagénicos. Aconsejamos siempre tener el asesoramiento de personal formado del sector de la higiene profesional y seguir las indicaciones del fabricante.
También debemos tener en cuenta que sin una correcta limpieza el proceso de desinfección NO cumple su objetivo. La higiene es indispensable para controlar las fuentes de contaminación. Por este motivo recomendamos establecer un plan de higiene en el que se especifique el proceso de desinfección que debe aplicarse a cada lugar y objeto (la frecuencia, procedimientos, productos utilizados..) para controlar y asegurar una buena desinfección .
En Dibosch tenemos más de 20 desinfectantes en el catálogo, con eficiencia testada y toda la documentación referente al producto, usos y composición. Con el objetivo de dar respuesta a todas las necesidades existentes de cada sector.