En primer lugar, la diferencia entre un producto normal y uno especial por máquina. Mientras que con lo normal, sólo hace falta una sola gota para producir un sinfín de espuma, con el adecuado para máquinas esto no ocurre. Se debe al hecho de que son productos de “espuma controlada”, lo que nos ayudará a evitar que se produzca espuma en el depósito de nuestra fregadora y no pueda dañar el motor de aspiración.

Para entender el concepto de los factores que nos ayudan a la limpieza, haremos referencia al circulo de sinner explicando los 4 elementos que intervienen:

• • Tiempo de contacto: la fregadora no tarda ni un segundo en mojar y secar el suelo. De ahí que el factor sea casi nulo.
  • Temperatura: en las fregadoras podemos poner agua hasta 50º, pero en el 90% de los casos, cargamos agua fría. Este factor es también casi nulo.
  • Acción mecánica: éste es el gran factor de la máquina fregadora. Las presiones que ejercen los cepillos pueden ir de 10 kg a 180 kg. Esta presión es la que nos ayuda a levantar la suciedad de la superficie.
  • Acción química: este factor variará según el producto químico que ponemos en la máquina. De ahí, la importancia del mismo.

Teniendo en cuenta que de los 4 factores que influyen en la limpieza, dos son nulos, debemos contrarrestar con los dos que nos quedan, QUIMICA Y MECANICA. Esto se traduce en que igual de importante es una buena fregadora como un buen producto químico, entendiendo esto no se nos resistirá ninguna superficie a limpiar. En el catálogo de Dibosch, podrá encontrar la línea de Fregadoras Comac y una variedad de productos químicos que se ajustaran a sus necesidades.

Imágenes  de  demostraciones  realizadas en nuestros  clientes.